Un viaje inusual en la carretera con un hombre mayor y un joven acompañante que van en dirección a un lugar desierto para que la transacción se lleve a cabo, intercambian palabras para comprender mejor lo que está por pasar, hablan de sus experiencias, su pasado y por supuesto que diría la familia si se entera. Comienzan las dudas, el pago está hecho —una cantidad sorprendente para que sea un simple pago por servicios sexuales—, así comienzan las historias que nos cuenta el director Eduardo M. Clorio en Conversaciones. 

“Estábamos pensando como podíamos plasmar a cuadro la historia de dos hermanos que se encuentran y que sus historias se van entrelazando…formando una gran historia que vemos a forma de 10 viñetas” dice en la conferencia de prensa Norma Mora, quién además de formar parte del elenco lo es del equipo de guionistas que llevaron al papel la idea original del director. También hace mención del árbol genealógico de la familia “ya se encontraba trazado antes que el guion”—menciona—, algo que se nota y hace que las historias tengan más credibilidad y no se noten forzadas para cumplir con el ciclo.

 “El que Eduardo nos dejara ser parte tan cercana del proceso de construcción de los personajes fue algo muy grato que los enriquece”, platica Pía Watson sobre el proceso para llevar a la pantalla a Latrina, a quién podemos ver en una transformación radical, pues pasa de ser una persona con la vida resuelta a convertirse en una chola que se dedica a robar y a torturar para recuperar la plenitud que le habían robado. 

Una cinta donde los buenos son castigados y se ven obligados a corromperse para poder sobrevivir en un sistema que premia a quienes cometen actos repudiables —desde hacer una broma que marque la vida de alguien o hasta matar— con el fin de poder satisfacer sus deseos, dejándolos con la dicotomía de ser ángeles en el cielo o demonios en la tierra.

“Todos estamos conectados y algo que para nosotros puede tener o no un gran peso, puede llegar muy lejos el resultado, en la historia en la que yo estoy ambos personajes toman decisiones que repercuten por generaciones” enuncia Michele Abascal quien junto a Marco Treviño tiran la primera ficha que hará que los otros sufran el efecto domino que durara en la familia por años.

“En todos los personajes hay un parteaguas, vemos a un personaje que está viviendo en una circunstancia… vemos como su mundo cambia y se pone de cabezas”. Nos cuenta Mora quien invita al público a ver conversaciones en las salas de Cinemex desde este 26 de noviembre fecha en que se estrena a nivel nacional. 

Gimena Gonzalez, Pía Watson, Michele Abascal, Norma Mora, Alberto Estrella, Marco Treviño, Tato Alexander e Israel Amescua, son el elenco de esta propuesta que te deja cuestionando las decisiones para tomar las más acertadas y mostrando que es lo peor que podría pasar.