Pocas son las veces que películas que conmocionan en Cannes, lleguen a salas comerciales de cine en todo el mundo. Y cuando suceden, se convierten en películas con un impacto cultural instantáneo y enorme. “Voraz” de Julia Ducournau, la intriga por ver la película fue tanto que llegó a distintas salas comerciales de todo el mundo, luego de haberse oído que, en distintas funciones, gente vomitaba por lo cruda de las escenas.

Pues parece ser que este año tendremos un nuevo caso de una película que escandalizó a la crítica en Cannes. Lo curioso, es que fue premiada en dicho festival a “Mejor Guion” para la directora Coraline Fargeat, quien ya había sorprendido a todos con su debut cinematográfico “Revenge”.

The Substance” es una atrevida mezcla de Body horror, comedia, sátira y terror.

Donde conocemos a una estrella de Hollywood que tiene un programa exitoso de fitness en televisión. Sin embargo, la edad la ha hecho perder de la popularidad y belleza que la hizo famosa. Tal desesperación la lleva a probar un método llamado “La Sustancia”, una droga que, una vez consumida, se convertirá en una versión “mejorada” de ella. Más sexy, bella y “perfecta”. 

Si ya la premisa es bastante interesante, es la ejecución parafernálica con la que Coraline maneja la trama. Termina convirtiéndose en el rave más caótico que se haya podido ver en bastante tiempo.

Comenzando con el manejo de cámara que es una clase de estilos y ópticas. No se abstiene y utiliza cada ángulos, movimiento y plano que pueda existir para impregnarle a la cinta un estilo del cual es difícil desprenderte.

Es válido decir que jamás se habían visto unos arc shots que embonaran a la perfección con un personaje. Y todos los arc shots utilizados en los momentos en que Margaret Qualley camina con toda una soltura y empoderamiento son verdaderamente eso, un ensalzamiento desmedido de la belleza y perfección que busca aspirar a ser el anticuado personaje de Demi Moore.

El cast va a la perfección con todo lo que tiene en mente mostrar la directora. Por un lado, una estrella de Hollywood cuyos años de oro se han esfumado, algo que la propia Moore está demasiado familiarizada en su propia carrera como actriz. Atreviendo a decir que podría ser la mejor interpretación de su carrera.

Por el otro lado, Margaret Qualley, quien parece no conocer lo que es una “crítica mala” en sus películas, la rompió en “Once Upon a Time in Hollywood”, “Poor Things” y recientemente “Kinds of kindness”. Fue la mejor decisión haberla incluido porque su belleza estrafalaria es lo que uno se imagina cuando desea convertirse en alguien “perfecto”. Por supuesto que ella no es solo divinidad, su interpretación es tan buena que carga con casi todo el peso de la película. Sus escenas son las más emocionantes y atractivas.

Claro que todo el glamour que emana Margaret, en parte, se apoya de la pulcra fotografía de Benjamin Kracun (“Promising young woman”). Quien tuvo una tarea difícil, la cual era poder emanar comedia y terror en una misma cinta. Se apoya del uso de color, brillos, colores mates y minimalismo para contrastar la vida de lujo de una, y el mundo autodestructivo de la otra. Así como las simetrías que generan caos, pues dentro de esos pasillos perfectamente balanceados, hay soledad, misterio y por ende, miedo.

Puede que los últimos minutos sean excesivos, la violencia sube de intensidad y todo se torna irreal. Pero son los últimos minutos más surrealistas que ni el propio Lynch se hubiese podido imaginar. Un sonido saturado pero onírico, la cámara cada vez más rápida y claustrofóbica, sangre y cuerpos deleznables. Terminan acentuando la perspectiva que Coraline no teme a decir desde un inicio.

La propia directora comentó en una entrevista: “Quise explorar hasta dónde llegan las personas en su búsqueda de perfección y las consecuencias que traen esos deseos”. Termina haciendo una crítica a lo que nosotros consideramos bello, a la juventud, la superficialidad y la negación de nuestra propia muerte.

La película se estrenará en salas mexicanas este 19 de septiembre. Además, muy pronto llegará a la plataforma de MUBI.