“Yo, Capitán” fue una de las cinco películas nominadas al Oscar a Mejor Película Internacional del 2023, está dirigida por Matteo Garrone y protagonizada por Seydou Sarr y Moustapha Fall, siendo el debut actoral de ambos. La película sigue la travesía migratoria de Seydou y Moussa, dos jóvenes senegaleses que sueñan con una mejor vida en Europa. Durante su viaje ambos experimentan una serie de eventos desafortunados que los hacen ser testigos de las problemáticas más fuertes de la migración.

La cinta tiene bastantes puntos positivos a la hora de desarrollar una historia como lo es la odisea de dos jóvenes africanos en busca del progreso en una tierra ajena. La primera temática que el guionista toma para devolver los conflictos internos de los personajes es, el abandono, principalmente del personaje de Seydou en el momento de partir de su hogar; ya que desde antes iniciar el viaje se les deja claro a los personajes que una travesía difícil y con una alta probabilidad de que alguno (sino es que ambos) mueran en el camino. Después de un breve momento de duda, los jóvenes deciden comenzar el viaje sin avisarle a alguien de su partida.

Los conflictos del viaje son presentados de manera exponencial, es decir, primero se les hacen advertencias a los jóvenes sobre cómo deben ir cuidándose de los grupos rebeldes y esclavistas, luego esas amenazas cobran vida en soldados despiadados y personas con una inhumanidad digna de pesadillas. Durante el segundo cuarto de la película el dúo protagonista atraviesa el desierto junto con un grupo de otros migrantes, el cual se va reduciendo conforme avanza el viaje, en este punto el personaje de Seydou experimenta una serie de delirios sobre cómo le gustaría que las personas que se quedan atrás floten para poder guiarlos sin que se los derrote el desierto y el calor.

Avanzando un poco más en la historia, después de que su travesía por el desierto termina y de ser separado de su primo Moussa, Seydou es llevando por las personas que se supone lo ayudarían a llegar al Líbano a un centro de esclavos donde es torturado por días y tiene más delirios. Es en esta parte donde se puede apreciar una fotografía y uso de luces naturales bastante impresionantes, principalmente en el uso de colores anaranjados y morados del atardecer.

La cinta a mi parecer tiene una especie de mezcla de tramas maestras que encajan a la perfección dentro de cada cuarto de película, la primera es una trama de aventura marcada por la partida de ambos de sus hogares hasta que Seydou es capturado, y durante esta segunda mitad, las trama se convierte en huida, el infierno que son los campos de prisioneros, si bien la película tiene una escena de tortura que a mi parecer es difícil de ver, creo que a comparación de otras producciones donde se muestra el sadismo al que el humano puede llegar, este filme es amable con el espectador dejando muchas de las atrocidades solo en una sugestión mostrada en las heridas de Seydou.

Llegando al tercer cuarto de la película, la trama se convierte en una búsqueda por reencontrarse con su primo para poder regresar a su viaje. Después de su reencuentro se empiezan a preguntar si realmente vale la pena seguir con su travesía, siendo que Moussa está herido por un disparo. Aquí la película retoma el tema del abandono y hace que ambos protagonistas expongan sus preocupaciones. Luego de decidir continuar, se ponen en contacto con otro pasante de migrantes, el cual les ofrece un pase gratuito si Seydou acepta dirigir el barco donde viajan los migrantes.

He aquí el porqué del título de la película, a lo largo del viaje hay muchas situaciones en las que los protagonistas son guiados por fuerzas mayores u otras personas a través del desierto y el continente africano, y es justo en este momento donde deben tomar las riendas de viaje y ser los capitanes de este, pasan de ser dos jóvenes temerosos de la adversidad a ser dos personas que toman la responsabilidad de llevar a muchísimas personas a través del mar sin ninguna garantía.

La cinta cuenta con un ritmo bastante agradable, en ningún momento baja la intensidad de los acontecimientos y la tensión que se crea en las situaciones adversas es debida a un guion y dirección excelente sumado a las actuaciones de ambos protagonistas que pese a ser su primer proyecto demuestran un talento increíble. Esta cinta presenta una clara crítica social migratoria y puede ser vista como una especie de analogía al cumplimiento del sueño americano, sin embargo, la trama o temática que más me hizo amar esta película fue la de un muchacho que tenía miedo a enfrentarse al mundo y a aventurarse por una vida mejor, una persona que fue guiada durante todo su viaje hasta que finalmente se presentó la situación de por primera vez dirigirlo y de tener la oportunidad de gritarle al mundo: “yo soy el capitán”