Sebastian GR, el talentoso, músico, compositor y musicoterapeuta, nos contó un poco sobre su pasado y como este lo trajo al lanzamiento de su material más reciente Maldita imperfección.

“Maldita imperfección es un despertar desde mi parte oscura, justo la letra dice ‘es momento ya de despertar’, más que estar dolido de muchas situaciones se trata de crecer y seguir adelante, todos hemos vivido cosas pero nadie tiene la culpa. Es muy difícil hacer que una persona despierte con una sola canción, es como un inicio hacia la conciencia de cada uno, pero para que llegue el mensaje completo tienen que ver el videoclip.

De repente para hacer el video, yo traía ideas muy extremas y Andrei Pulver, me llevó a una buena dirección. Al principio fue complicado soltarme frente a la cámara y expresar la canción con movimiento corporal. Lo que hicimos fue darle sentido visual, en donde tengo la cara llena de sangre, lo que quería dar a entender es que me han lastimado, pero ya quedó atrás”.

El multiinstrumentista cuenta que hasta ahora Maldita imperfección ha encontrado la mayoría de su público con personas mayores. “A los jóvenes les gusta la música pero la letra ha tenido más aceptación con gente de 35 a 45 años”. El sencillo más reciente, forma parte de tres canciones en las que Sebastian GR ha trabajado como una necesidad personal. La primera de ellas cuenta ya con un live que el artista perfeccionó y la tercera está en camino.

“Bendita Imperfección, fue mi primer single y salió bien, como yo quería. Normalmente mis músicos y yo no tenemos ensayos, le damos unas tres vueltas y lo grabamos. Tengo muy buenos músicos y si trabajan lo suyo en casa no hay necesidad de ensayo además cuando llegan, se desenvuelven como ellos mismos y hay una parte en la que tienen que improvisar con lo que cada uno trae, eso lo vuelve mejor.

En este mundo, sigue en producción, aún falta mezcla pero esta canción saldrá muy pronto y el cierre de la obra, es más suelta, más pesada y más fuerte. Habla sobre una experiencia que tuve en un bar con amigos y mi hermano, todo se fue al extremo, las cosas peligrosas fuera de control, ,, es una experiencia en este mundo que viví, la historia es 

Me gustaría que cuenten su historia y una experiencia única que hayan tenido en esta vida”.

El artista, comenzó su carrera musical desde los 5 años y pisó su primer escenario de bar tres años después. Con este amplio conocimiento, el también musicoterapeuta nos contó sobre cómo agrega algunas técnicas de esta terapia en su música y sobre el mensaje que quiere que sus escuchas interpreten.

“No es fácil que una persona despierte solo con una canción, pero yo espero que quien escuche activamente mi canción, tenga ese sentido de “Wow ¿Qué sucede? y ¿Qué estoy haciendo?”. En este single lo que quise plasmar es que la persona tenga un movimiento físico, que su cuerpo reaccione ante la rítmica y la guitarra. Yo empecé como músico de sesión, pero dejé de grabar para otros, puse mi cara, mi nombre y pues me siento bastante contento con eso. Estar ahora como solista me ha ayudado mucho en mi vida personal y me ha ido bastante bien porque he crecido mucho y me ha ayudado en mi salud mental. Entonces yo creo que sí puede generar una conciencia”.

Hacia el final de la entrevista, el compositor nos contó sobre cómo se convirtió en musicoterapeuta y las experiencias personales que lo llevaron a querer ayudar a otros con su música.

“Es una historia extraña, yo fui a una clínica psiquiátrica buscando ayudar personas en situación de intento de suicidio, platique con varias personas ahí hasta que llegué con el doctor Enrique Flores, nos hicimos amigos y él me dijo “si quieres ayudar, necesitas estudiar”. Yo le había platicado que era músico, así que me mandó con Víctor Muñoz, su amigo, que creó la Terapia Humanista. Terminé un master en esa terapia y luego el doctor me dijo, ahora tienes que hacer la maestría en Psicología, continúe y mi conocimiento de musicoterapia se amplió muchísimo. Como humano y como músico, al final ayudar es una situación muy delicada que requiere mucho trabajo. Incluso yo estuve en terapia intensiva por intento de suicidio, de los 18 a los 20, por eso acudí después queriendo ayudar, pero a veces la intención no lo es todo”. 

Pronto escucharemos más de este talentoso ser humano. Sin duda todos hemos vivido situaciones difíciles, por lo que es genial que artistas como Sebastian GR, utilicen su conocimiento terapéutico para desarrollar nueva música con la que seguro muchos pueden identificarse e intentar ¡despertar!