Hijo de actores junto a quienes hiciera su debut en teatro, Ricardo Darín puede presumir de más de 50 años de carrera. Su fama internacional no fue un golpe de suerte, fueron su trayectoria y sus credenciales como intérprete las que poco a poco fueron moviendo los reflectores hacia su nombre. 

Su incursión en el medio, a sus escasos 6 años, fue en radio, en donde era parte de una radionovela; pero fue hasta 1995 que logró obtener el primer reconocimiento como Mejor actor de Comedia gracias a su participación en la serie televisiva “Mi cuñado” donde trabajó por primera vez junto a Luis Brandoni, después se reencontrarían en La odisea de los giles.

Hablar de Ricardo Darín no sólo es hablar de los éxitos: Nueve Reinas, Relatos salvajes, El secreto de sus ojos o El hijo de la novia. Su valor no sólo radica en su interpretación que, por cierto, ha sido sobresaliente en todas sus cintas; también se ha ganado el cariño del público, pero por encima de ello, es de reconocer su valentía. 

Y es que Ricardo Darín tuvo las agallas de rechazar a Hollywood, no por un arranque de ego u orgullo, sino por fidelidad a sus propios principios. Ni siquiera con Denzel Washington como posible compañero de set, Darín traicionó sus ideales y es que el papel que le ofrecieron interpretar era el de un narcotraficante.

Sin importar el número de ceros en la oferta, Darín optó por no ser la imagen de un estereotipo que condena a latinoamericanos a representar al narcotráfico en EE.UU., a pesar de ello el actor goza del reconocimiento internacional y su decisión se convierte en un ejemplo para quienes aspiran a una carrera exitosa.

Con un carisma particular, un semblante que atrae y con una carrera prolífica que aún tiene mucho qué ofrecer, Ricardo Darín llega hoy a sus  64 años y qué mejor que celebrarlo disfrutando de un maratón de sus cintas, desde XXY en Netflix, Relatos Salvajes en Prime o El secreto de sus ojos en Blim.