El 12 de mayo pudimos gozar del estreno del tercer álbum de estudio de los neoyorkinos Crumb, banda caracterizada por emplear elementos del synthpop y psicodelia a sus canciones.

Tras el éxito de Jinx (2019), y Ice Melt (2021), han tenido han comenzado a ser relevantes y a ganar cierta popularidad y fandom, llegando a tener colaboraciones con músicos de la misma corriente, como el caso de Melody´s Echo Chamber, con quien lanzaron el año pasado Le Temple Volant.

Una de las cosas a destacar de la banda es su constante actividad, pues desde 2019, se han mantenido en constante producción de álbumes y canciones, de a dos por año en promedio. Resaltando la proeza de Crumb para la composición, y que definitivamente la creatividad sobra.

Con tan solo 35 minutos de duración, demuestran que es suficiente hipnotizar a su audiencia con temas que se sienten frescos, divertidos y únicos. Tal es el caso de la canción que lleva el nombre del álbum, “AMAMA, la cual cuenta con un sample de una nota de voz de Whatsapp de la abuela de la vocalista Lila Ramani, tras eso, prosigue una melodía bailable pero astral.

Después llega “Genie”, con la que demuestran la faceta más experimental de la banda. Siendo la más duradera del repertorio, no termina aburriendo por lo adictiva que es, principalmente por lo envolvente y variada. Con capas y texturas producidos principalmente por el uso de sintetizadores, es simplemente imposible no sentir la euforia.

No temen combinar géneros, pues tanto el pop, el rock, elementos de jazz y por supuesto, la psicodelia, se mezclan con la suave voz de Lila, quien susurra abstracción pura, la cual denota desde su portada terrenal.

Temas como la soledad, y la identidad, la familia y el amor se hacen presentes en al álbum, un collage de emociones y sonidos matizados. Puede ser ese el significado del nombre, Amama y Amalgama, o puede que no. Pero es un hecho que la banda no ha defraudado y sus andanzas en el pop psicodélico suave se puede acercar a nombres pesados de un género que, por más de una década ha cautivado a muchas personas.

En conclusión, Brl, Jesse, Ramani y Jonathan, bajo la producción de Johnscott Sanford y Jonathan Rado, crearon todo lo que se espera al oír sobre material nuevo de Crumb. Cantidades abismales de sintetizadores, reverbs, delays y guitarras melódicas saturadas. Con sonidos que parecen solo funcionar después de la medianoche, para reflexionar las ideas que proyectan en su lírica.

Si no has escuchado a esta banda, es un buen momento para hacerlo.