Tras la difícil decisión de mantenerse en pie pese a la situación actual de la contingencia sanitaria, el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), encabezado por Daniela Michel, arrancó actividades este 28 de octubre, luego de recibir mensajes de apoyo y reconocimiento de figuras como Alfonso Cuarón y Guillermo del Toro.

Por primera vez en 18 años, no hubo un camino rojo que enmarcara el desfile de realizadores, actores, productores y amigos del festival; en cambio reinó el entusiasmo por ser parte – de manera presencial o a distancia- de la celebración más grande del cine que tiene nuestro país, aunado a la gran responsabilidad de hacerlo bajo el seguimiento estricto de las normas de seguridad. 

En su primer día de actividades y en colaboración con Sundance Collab, se llevó a cabo un webinar con el guionista y cineasta Calor Cuarón titulado: La vida de los personajes: de la palabra a la imagen. Por poco más de 90 minutos, el mexicano compartió algunos consejos sobre la creación de personajes y protagónicos, además de su experiencia y visión sobre el cine.

A la par, el elenco de Amores Perros junto con su director Alejandro González Iñarritu, recordaron, previo a la función inaugural, anécdotas y recuerdos que conservan con cariño sobre el trabajo de preparación y producción de la cinta. Además durante el encuentro, se anunció que la versión remasterizada de la cinta llegará a cines con motivo de sus 20 años.

Durante la ceremonia inaugural no sólo se retomó el tema del cine como una de las industrias que han sido golpeadas por la pandemia, sino también por la reducción de estímulos para su realización. En los discursos se hizo énfasis sobre la relevancia del cine en la sociedad, elevando así la noble labor que lleva a cabo el FICM en el impulso y difusión de talento nacional.

Además, se homenajeó a Alejandro González Iñarritu por su cine, logros y trayectoria. Durante la ceremonia se le otorgó el premio a la Excelencia de Creación Cinematográfica y se develó la placa al premio a la Excelencia, una escultura del michoacano Javier Marin que representa el renacer. 

FICM, Foto: Delia Martínez

El cineasta mexicano también develó la placa conmemorativa de la edición de 17 del festival así como la ya tradicional butaca con su nombre grabado que permanecerá en las salas del complejo de Cinépolis Morelia Centro. En su discurso, no sólo se unió al reconocimiento por el valor de llevar a cabo el festival y agradeció que su cinta Amores Perros fuera la cinta que diera apertura al FICM este año.

En su discurso no omitió dejar en claro su postura “Nadie podrá estar jamás en contra de apoyar a los que menos tienen, es importante que los olvidados sean recordados, rescatados, apoyados, los primeros que reciban y ser considerados. Nadie podría estar en contra de ese guión, pero como el guión de Alcoriza y Buñuel que es un guión perfecto, tiene que ser bien ejecutado. Por mejor que sea, con un muy mal director es una mala película”

“El concepto de pobreza se tiene que replantear en otras áreas no solo en la económica. La pobreza intelectual, la cultural y la espiritual es el origen de la pobreza económica”, agregó el director. Categóricamente expresó que un país sin cine es un país ciego. “No sólo del pan vive el hombre”.

Con su discurso y la presentación de Amores Perros, Iñarritu no sólo concluyó la primera jornada del FICM, sino que también dejó sobre la mesa argumentos de apoyo al cine mexicano y también razones para, hoy más que nunca, unirnos a la celebración de una edición más del festival de Morelia