Estamos en tiempos de transición. Transiciones hacia supuestas nuevas normalidades, transiciones económicas y casi inexistentes transiciones de pensamiento. Estamos en transiciones de forma y en una exploración —a veces improvisación— del terreno que nos rodea y con el que hemos convivido durante los últimos meses. Hemos encontrado deficiencias; cosas que funcionarían ‘’si acaso…’’. Sin embargo, también hemos encontrado sustituciones y creaciones. ¿Duermen los peces? va encontrando un camino.  

Hace unos días, Boris Schoemann anunció la programación para los siguientes meses del Teatro La Capilla y esta obra del dramaturgo alemán Jens Raschke estrenó el pasado sábado. El texto es una comedia cuyos protagonistas son Jette y su hermano, dos niños que confrontan una situación que, a su edad, podría parecer distante y algo incomprensible: la muerte. Es, personalmente, este tipo de confección el que me gusta en las historias donde personajes de corta edad son su centro: sensaciones reales que no desdeñan sus preguntas genuinas e inteligentes y, que a menudo, resultan más cruciales que las de los adultos. 

Hay pocos catalizadores que generan una serie tan amplia de disyuntivas lógicas y atemorizantes como el encontrarse caminando —o ver cómo alguien cercano camina— hacia el final de la vida. Adriana Reséndiz es quien interpreta a esta hermana que no solo ve partir a su hermano, sino quien junto a él construirán las respuestas a las cuestiones que ni sus papás ni los maestros pueden. Con una actuación rítmica y verosímil no solo demuestra que conoce bien a su personaje sino también revela que, seguramente junto a su directora Aracelia Guerrero, han intentado y, en consecuencia, encontrado una forma de aventajarse de su escenario. 

En la mayoría de los trabajos que he podido ver en línea los actores permanecen estáticos frente a su pantalla —y atención, que no estoy demeritando sus decisiones y la calidad que varios de sus artistas han desplegado aun con las limitaciones del formato—. Sin embargo, Teatro Reno ofrece su función con utilería incluida y desde un departamento que utilizan a su favor: las ventanas, las habitaciones y las puertas no son solo la anchura de los sentimientos de esta niña, asimismo son sus cambios de escenografía: son los espacios por los que correrá Jette para dibujar sus conclusiones. Adriana toma su dispositivo sin miedo y corre con él, invitándonos a conocer un poco más de su intimidad. 

¿Duermen los peces? es un montaje cuidado que disminuye la quietud de lo que acostumbramos a ver por ZOOM y que aún aferrándose a la tan polémica característica —para la mayoría esencial— del ‘’en vivo’’ teatral me ha llevado también a hacerme preguntas que nadie pudo resolver hace ya algunos años y que, inevitablemente, han aparecido de nuevo en mi camino. Hay preguntas cuya respuesta siempre llegará. Hay respuestas que, al no presentarse, hacen que los mares parezcan más turbulentos. Hay veces que simplemente debemos conformarnos con la paradoja de que la única respuesta absoluta es que no todas las preguntas pueden ser contestadas. 

  • Sábados del 4 al 25 julio, 13:00 h.
  • Entrada general: $100 y $200
  • Dramaturgia: Jens Raschke 
  • Dirección: Aracelia Guerrero 
  • Elenco: Adriana Reséndiz
  • Duración: 60 minutos 
  • Género: Pieza cómica