Ser actriz, productora, directora y bailarina, son solo algunas de las áreas en las que Jimena Luna Deschamps, tiene experiencia y ha tenido éxito. Y en el marco de las actividades de la Muestra Itinerante de Cine MX, platicó con nosotros para compartirnos esta experiencia, además de conocerla más a fondo.

“Este tiempo en casa, para mí ha sido más de creación y de reinventarme”

Jimena Luna Deschamps, es actriz  y  bailarina  graduada  de  The  American  Musical  and  Dramatic  Academy  en  Nueva York, estudió  Danza  en  Broadway  Dance  Center  y  Alexander  Technique  en  The  Juilliard School. Comenzó su carrera  a  los  7 años  en la  película  Comando Dragón y este año se estrenó como productora, directora y actriz de su primer cortometraje, From Ashes. Además, es creadora de Sit with me in Wonderland, una experiencia de meditación guiada con personas de todo el mundo.

La bailarina, nos contó cómo fue ese primer acercamiento al arte y su evolución y camino desde sus inicios como actriz tan pequeña hasta llegar a Nueva York.“Es como la historia cliché, de que nací con ese bichito. Crecí con una familia donde había artistas y futbolistas, pero el fútbol, para mí, no era tan apasionante. Crecer en este ambiente, me despertó esa chispa y me nutrió mucho”. 

Sin pensarlo dos veces, Luna Deschamps elige el tiempo que pasó en la ciudad neoyorkina como uno de los mejores momentos de su vida. “En esos años, pude salir de estereotipos, de sentir que tenía que vivir en una caja. Esa ciudad me ayudó muy joven a quitarme ese saco y no querer encajar. Me llené de maestros de actuación que se convirtieron en momentos de vida”.

Jimena también recordó que sus padres la llevaban al teatro a ver a sus tíos; desde entonces la actuación se convirtió en un mundo en donde ella se sentía feliz. Desde los 11 años, comenzó a hacer teatro musical, aunque reconoció que era un labor pesada para su edad; “además mis papás no querían explotarme, entonces me educaron como niña un poco más normal”. 

Ya de joven, en la preparatoria tuvo que tomar una decisión como muchos de nosotros; pero Jimena parecía tener claro desde antes su destino.Nueva York fue el punto geográfico donde su corazón quería estar. Ahí, entró a Broadway Dance Center, después fue aceptada en Julliard, donde, nos confesó, pasó los momentos más importantes de su vida. 

Durante la charla, la actriz nos habló del significado que tiene para ella su profesión y aunque con cada proyecto sigue descubriendo facetas y razones del por qué ama lo que hace “está hilado con el ser humano, con esta empatía de poder pisar el lugar de alguien más. Todos tenemos una historia y todo es válido. Estoy en un punto donde siento una conexión muy fuerte con la actuación, con estar vivo y con el ser humano”.

“No puedo no pisar los zapatos de ese personaje”

Dentro de toda esta introspección y trabajo, para la actriz de teatro, uno de los proyectos en los que más le ha gustado trabajar fue en Doctor Faustus, con Maricela Alvarez y Emilio García. Pese a que fue uno de los proyectos que más miedo le dio pero al estar durante tres años en temporada le permitió vivir el texto en distintas etapas de su vida. 

Jimena Luna, se rodeó de compañeros y tomó lo que estaba a su alcance para realizar el proyecto que había visualizado en un sueño. Emprendió como productora y directora con el  cortometraje From Ashes, “el 2019 fue un año donde frené toda mi vida para cuestionarme quién era yo y cuáles eran mis ideas de vida y para mí fue una reconstrucción como el ave fénix que vuela, cae en cenizas y vuelve a resurgir”.

La también productora, nos contó sobre su interés por la meditación y su espiritualidad heredada de su abuela. Cuando incursionó en el medio también se afrontó a proyectos complejos, a la toma de decisiones importantes o comprender que un papel no era para ella. “Yo dije necesito herramientas que reacomoden mi valor, porque mi valor no está en un proyecto. Y este era el mismo mundo de la imaginación de la actuación con el que yo me guío. La actuación deja de ser una experiencia para lograr un aplauso, se vuelve algo más intenso”.

A la par, Jimena llevó la meditación guiada a: Sit with me in Wonderland, donde trabaja con personas de todo el mundo e incluso ha compartido pantalla con Deepak Chopra en The Assemblage NYC. Integrar sus dos pasiones ha sido una experiencia inigualable, nos cuenta.  “Nunca imaginé que mi búsqueda de herramientas podría tener un impacto en alguien más. El evento se agotó como a los dos días, me da paz saber que hay grupos que se juntan a hacer estos grupos de conciencia y me emociona compartirlo.”

Y como a la productora, le encanta abrir sus horizontes, creó 21C, un podcast como resultado de la cuarentena. Hizo una lista de todas las personas en su vida que admiraba y se percató de todo el talento que la rodeaba, le pareció buena idea abrir el proyecto para realizar esas preguntas que tenía para ellos. 

-Además, fue un plus para la comunidad de seguidores de meditación en línea. El nombre está inspirado en el primer departamento en el que viví en Nueva York y también en el siglo en el que vivimos. Fue el momento de conocerme independiente y adulta y hablamos de las artes en el siglo 21. No quería encasillarlo a una sola cosa, porque soy muy curiosa, así que también hablamos de ecología, de salud mental, de igualdad y cultura, para compartir con la gente y compartir a la gente que ha sumado tanto a mi vida.

Sobre sus ambiciones y lo que le inspira nos contó que busca seguir creciendo y construyendo espacios de bienestar. Hacer cine y televisión también está entre sus planes aunque se reconoce como actriz de teatro. Cada trabajo para ella es un bebé que va cultivando y juntos van creciendo. Además, de que la meditación es una herramienta poderosa. 

Mi mayor miedo es la muerte de mis familiares, la muerte ha sido un maestro muy fuerte para mí y ha marcado una pauta de mis cuestionamientos y mundos de reencuentro con la gente que quiero. Es un tema bastante fuerte enfrentar como acomodar el dolor a partir de la meditación y compartirlo con otras personas que tal vez, se sientan igual y he estado transformando ese miedo en creatividad”.

“Hay más de mí, de lo que se ve y de lo que sé”

Para cerrar con la gran conversación, Jimena nos contó de la ocasión que se encontró con Demián Bichir en una librería. “Me acerqué a decirle que me encantaba su trabajo, le conté que estoy en estos dos mundos de la danza y la actuación y él me dijo, “la danza es lo mismo que la actuación solo que estas utilizando una parte más corpórea de ti” y me marcó bastante porque yo nunca lo había pensado así. Si no está pasando nada en tu cara o en estos estímulos, solo va a ser un brazo que se está ahí moviendo. La danza me hace sentirme libre, pero la actuación tal vez le gana un poco.”

Jimena Luna Deschamps concluyó definiéndose en una palabra: Wonderland, el país de las maravillas, en ese espacio radica todo lo que es, su búsqueda y su corazón.