¿Cuántas veces hemos escuchado que la vida es un juego? A menudo se nos incita a disfrutar del día a día, pero nunca nos enseñan el significado y alcance de esas palabras. Cuando se es joven se ambiciona probarlo todo; gozar llega a ser sinónimo de torpeza, impulso e imprudencia. En la madurez lo mejor llega cuando se está en silencio frente a un televisor. Entonces, ¿dónde queda ese momento de júbilo real ante el día a día?

También se escucha con frecuencia que con los años llega la sabiduría necesaria para dar respuesta a ésa y otras incógnitas. De alguna manera pareciera que nos hemos resignado a esperar un despertar que nos haga sonreír ante nuestro pasado, presente e incluso hacia el porvenir. Mientras ese día llega, convertimos a la imaginación en nuestra alianza más poderosa para visualizarnos frente a una cálida fogata en el eterno pero relajante vaivén de una mecedora de caoba.

Pau Miró se dio a la tarea de confrontar la idea de la tercera edad. Con su obra Jugadores entabla un diálogo con sus espectadores, donde la edad no significa nada. La puesta en escena nos lleva a la reflexión sobre el impacto de cada paso que damos y lo hace sin exageraciones ni situaciones poco creíbles, pero sí con matices de comedia. Además, con cada giro inesperado garantiza la satisfacción del público y agradece su atención con extraordinarias actuaciones del elenco.

Bajo la dirección de Luis Eduardo Reyes, Héctor Bonilla, José Alonso, Salvador Sánchez y Patricio Castillo evidencian en sus interpretaciones la experiencia que su amplia trayectoria les ha dejado. Con gran entrega en su papel, dan vida a la historia donde cuatro viejos amigos deberán encontrar un nuevo sentido a su relación, a su profesión e incluso a su vida. Aceptar que el paso del tiempo mengua el físico mientras reconocen que el alma siempre será joven, serán factores fundamentales para tomar decisiones que marcarán su destino.

Problemas económicos, relaciones de pareja e incluso adicciones serán parte de la vida de los protagonistas, quienes no encuentran en sus cabezas canas la fórmula mágica que estaba destinada a detener los sueños, los impulsos y la torpeza. Así, dejarán su tradicional partida de cartas para jugarse algo más que unos pesos, la apuesta está en la vida, en un arrebato de juventud que les recuerde la bella sensación de adrenalina.

Jugadores  se presentará en el Teatro Xola Julio Prieto hasta el 30 de julio.

  • Autor: Pau Miró
  • Dirección: Luis Eduardo Reyes
  • Con: Héctor Bonilla, José Alonso, Salvador Sánchez, Patricio Castillo
  • Segunda Temporada
  • México, 2017