Así como en México, Francia también vivió disturbios y protestas estudiantiles. La primavera francesa tuvo lugar en mayo de 1968. A propósito del ánimo que nos envuelve por la conmemoración de los movimientos sociales ocurridos hace cinco décadas, la recomendación de hoy es Los soñadores, de Bernardo Bertolucci.

La cinta retoma los sucesos que se vivieron en las calles parisinas durante aquel fatídico año; se trata de la marcha civil ocasionada por la destitución de Henri Langlois, director de La Cinémathèque française.

Este hecho conmocionó a jóvenes cinéfilos, actores y figuras importantes del séptimo arte como Jean-Luc Godard, François Truffaut, Abel Gance, Joris Ivens, Chris Marker, entre otros. Justo en medio de una manifestación es en donde los protagonistas tienen su primer encuentro.

Matthew (Michael Pitt) es un estudiante de intercambio norteamericano, sus ratos de ocio los pasa viendo toda clase de películas en la Cinémathèque. Su ávido gusto por el cine le permite entablar una amistad inmediata con los gemelos Isabelle (Eva Green) y Théo (Louis Garrel), ambos participantes activos de los movimientos revolucionarios.

El vínculo entre los tres personajes evoluciona a tal grado íntimo que nos hace pensar que sus rumbos serán inseparables. A medida que Matthew ­­­­­­­­­­­­­­siendo un chico de carácter inhibidoconvive con los hermanos, se adapta a la peculiaridad de su relación, que va más allá de lo convencional.

A primera instancia, el comportamiento inusual de Théo e Isabelle desconcierta al espectador; sin embargo, ambos expresan nada más que la naturaleza de sus ideales, una rebeldía que desafía a las normas sociales, a las imposiciones y al conservadurismo.

En Los soñadores vemos la manifestación de los jóvenes en torno a los movimientos civiles, desde los primeros minutos la película nos contextualiza en medio de la búsqueda de la justicia y el cambio que se gestó en los eventos de mayo de 1968, época de importante valor histórico en Francia.