Velvet Buzzsaw
Precisa, extrañamente graciosa, soberbia y con un toque de excentricismo es como se le puede definir a Velvet Buzzsaw, uno de los recientes estrenos de Netflix. El misterio que la productora guardó para dar a conocer los detalles de la cinta dirigida por Dan Gilroy generó grandes expectativas aunado a la sátira que prometía en torno al arte.
Clasificada en una inexplicable mezcla de comedia de terror, la cinta raya más en el suspenso, género al que Gilroy alimenta con sarcasmos, ironías y humor negro para sumergirnos en el competido y traicionero ambiente del arte. La historia se detona cuando Josephina (Zawe Ashton) encuentra una colección de pinturas.
Los lienzos causan furor y logran fascinar rápidamente a críticos, artistas y curadores; por lo que todos buscarán hacerse de una pieza de la invaluable colección. Sin embargo, la obra parece poseer una fuerza sobrenatural que desatará una serie de infortunios, pese a las advertencias del respetado Morf Vandewalt (Jake Gyllenhaal).
En menos de un minuto, el protagónico a cargo de Gyllenhaal aparece a cuadro para dejar en claro que su actuación no nos defraudará y que es responsable de dotar de gran valor de la película. Su lenguaje corporal nos recuerdo vagamente a su papel como Johnny Wilcox en Okja que se mezcla con una dosis triple del estilo de Davis Mitchell de Demolition.
Al dúo Gilroy-Gyllenhaal se suma Rene Ruso interpretando a Rhodora Haze su temple y elegancia supera el trabajo de Toni Collette. Los giros que toma la historia cumplen al comprometer al espectador a tratar de unir los cabos y aún así Velvet Buzzsaw es todo menos predecible.
Sin embargo, el director no logró una entrega impecable como lo hiciera con Nightcrawler; pues Velvet Buzzsaw termina por fallar. El desenlace pasa del suspense a lo chocarrero en las últimas secuencias; degradando por completo la magistralidad con la que se narró el 80% de la trama, la originalidad se pierde y la sátira se diluye en una película más de su tipo.
En este punto, debo aludir a mi sinceridad, y es que pese a que Velvet Buzzsaw se sintió más como una decepción, el trabajo histriónico hace que cada segundo de la cinta valga la pena, desde los personajes secundarios como el de John Malkovich, hasta sus protagonistas Zawe Ashton y por supuesto el infravalorado Jake Gyllenhaal.
Velvet Buzzsaw es esa película de la que se reniega pero al final se recurre a la típica frase “tiene un no sé qué, que me atrae” para justificar su imperfección. Así que si pueden, no dejen de verla.
- Velvet Buzzsaw
- Estados Unidos, 2019
- Director: Dan Gilroy
- Guión: Dan Gilroy
- Con: Jake Gyllenhaal, René Russo, Zawe Ashton, Toni Collette, John Malkovich
- Duración: 109 minutos