Juegos Inocentes, es la nueva película del director noruego Eskil Vogt, mano derecha de Joachim Trier, con quien compartió una nominación a mejor guion original en 2022 por La Peor Persona Del Mundo. En esta ocasión Vogt nos presenta la posibilidad de un mundo fantástico con niños que tienen poderes en una forma muy peculiar de mostrar el autismo.

Ida, se muda con sus padres y su hermana Anna quien tiene autismo a un nuevo lugar durante el verano, en donde conoce a Ben, un niño que le muestra que tiene poderes. A la vez Anna conoce a Aisha quien tiene otras habilidades. En medio del caos que pueden representar niños con poderes, comienza una discusión entre lo que es bueno y es malo, lo que es convencional y lo que es extraño, lo que es real y lo que es ficticio; con un toque de realismo mágico.

En esta película hay que lograr entrar en las convenciones que pretende mostrar, pues, esto permitirá a la audiencia conectar con lo que está en pantalla, de lo contrario se podría sentir falta de coherencia, pero no, la película la tiene dentro de su propio universo. Será muy importante la perspectiva de cada espectador, lo que da una profundidad de análisis sumamente perspicaz.

El trabajo de Vogt en este filme es un ejercicio cinematográfico extraño, por la poca claridad de lo que quiere hablar en específico, en momentos es un drama, en otros es una película de terror y luego se convierte en una película de superhéroes; se ve una notoria influencia en otras historias como X-men, Stranger Things y la trilogía de Glass. 

Tal vez la perspectiva que más pueda llamar la atención de lo que presenta la película es que todo lo que sucede ocurre en la mente de Anna, una ejemplificación visual de la hipersensibilidad y la sobreestimulación con la que perciben el mundo las personas con autismo.

¿Te gustaría entrar en este mundo de los Juegos Inocentes y encontrar tu propia perspectiva? Pues, la cinta de Eskil Vogt estrenada en 2021 en Cannes, por fin llega a México y se podrá ver en varias salas a partir del 4 de mayo.