La revolución en Las vidas de Sing Sing
La obra de teatro “Breakin’ the Mummy’s Code” se presentó por primera vez en 2005 en el Centro Correccional Sing Sing, una prisión para hombres de máxima seguridad en Nueva York, protagonizada por personas privadas de su libertad es la inspiración para la nueva carta de amor a la expresión artística humana que el director Greg Kwedar nos regala en “Las vidas de Sing Sing”.
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Protagonizada por Colman Domingo interpretando magistralmente a John “Divine G” Whitfield, un hombre que estuvo privado de su libertad por crímenes que no cometio. Lidera una compañía de teatro en prisión que intenta presentar su primera comedia. Al hacerlo, muestran cómo la programación de arte en prisión ofrece a los hombres (y mujeres) privados de libertad un poderoso escape y un medio catártico. Coproducida por Domingo y distribuida por A24, la película está inspirada en la amistad de la vida real de los ex alumnos de RTA John “Divine G” Whitfield (interpretado por Domingo) y Clarence “Divine Eye” Maclin, quien se interpreta a sí mismo en la película y actuó por primera vez como parte de un programa de RTA en Sing Sing.
Todo el elenco de “Sing Sing”, a excepción de los nominados al Oscar Paul Raci y Colman Domingo, está formado por ex actores que estuvieron encarcelados y ex alumnos del programa de artes de la prisión, Rehabilitation Through the Arts. No siendo el único punto donde la producción propone una manera honesta de contar esta historia ya que “Sing Sing”, como describe Domingo para Varity, es mucho más que una bonita historia con un reparto novedoso: es una señal de alerta para una industria cinematográfica en crisis. Es una anécdota plasmada con tomas y actuaciones tan intimas como se requieren para no dejar en duda la serie de decisiones que se tomaron.
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“Sing Sing” defiende un modelo que el director Kwedar llama “cine comunitario”, que se esfuerza por emplear las localizaciones y personas reales que se retratan en la película. La ´produccion se dio en 2022 en el centro penitenciario Downstate de Nueva York, semanas después de que se desmantelara la prisión. Apoyando un nuevo modelo económico el reparto y miebros de producción de “Sing Sing” recibieron el mismo salario, basado en los mínimos semanales o diarios del SAG. Recibiendo una participación equitativa en las ganancias de la película a todas las personas que trabajaron en la película.
El largometraje hace constantemente la pregunta de Hamlet ¿Si somos prisioneros para siempre de nuestras acciones? No sólo siendo una metáfora del tema de la película sino también arrojando la pregunta hacia la industria cinematográfica. La película interroga los sistemas laborales que sustentan la producción cinematográfica y pregunta fusionando a Shakespeare y Marx, si los actores, como mano de obra, están hechos por su arte o por sus financistas.
“Sing Sing” esta cargada de personalidad vulnerabilidad y cuestionamientos que no podrían llegar en mejor momento, dejando al publico conmocionado y demostrando que al momento de llevar una historia a la pantalla grande o al escenario lo mas fundamental es un equipo que esté dispuesto a decir la verdad humana. Agradeciendo a Cine Canibal por la invitación a la función de presa, les invitamos a tomar de la mano a estos grandiosos artistas y cuestionar juntos la manera en como disfrutamos nuestra libertad.