De manera creciente, la Academia parece interesarse más y más en las narrativas británicas y especialmente en las irlandesas (véase Braveheart y Belfast). Este año, el peculiar discurso de Los Espíritus de la Isla logró colarse en los galardones más importantes del año hasta llegar a la nominación a Mejor Película.  

The Banshees of Inisherin es una película irlandesa de 2022, escrita y dirigida por Martin McDonagh y estelarizada por Colin Farrell, Brendan Gleeson, Barry Keogan y Kerry Condon. Dos amigos de toda la vida se encuentran en una encrucijada cuando uno de ellos termina su amistad abruptamente, con alarmantes consecuencias para los dos. 

En los últimos años, el cine ha visto un creciente interés por las narrativas folklóricas, y aunque la mayoría de los ejemplos más populares provienen del terror, el cineasta inglés Martin McDonagh se ha encargado de expandir esta corriente de tipismos culturales a otros géneros.

Aunque ya habíamos visto ejemplos en sus cintas pasadas, es en su obra más reciente donde el cineasta se zambulle por completo en la dramedia folklórica. Situada en una pequeña isla de Irlanda, la historia que nos presenta es un claro ejemplo de un relato que aprovecha cada pequeño aspecto provincial para construir su diégesis. 

Sólo a través de los ojos de este director británico podemos comprender la belleza inadvertida de las salvajes costas irlandesas. Y sólo a través de los ojos de estos personajes es que podemos entender el tipo de hastío al final de una vida vivida en los limitadísimos confines de la campiña del Reino Unido. 

Utilizando la guerra civil irlandesa como marco histórico para nuestra historia, McDonagh nos habla de la frustración de vivir siempre al margen del resto del mundo y de la insignificancia que en realidad tienen los conflictos interpersonales, por más que se sientan como el fin del mundo para quienes los atraviesan. 

Como les es costumbre Colin Farrell y Brendan Gleeson realizan excelentes trabajos representando la callada derrota dentro de sus personajes y la creciente desesperanza de saber que tu legado morirá en el instante en que termine tu entierro, todo esto al mismo tiempo que encuentran un balance sorprendente entre la ridiculez y la sinceridad. 

Desafortunadamente, cuando se cuentan historias tan específicas sobre ciertos momentos y lugares, se corre el riesgo de alienar a la audiencia, dejando fuera a muchas personas que simplemente no pueden relacionarse con espacios tan o situaciones tan específicas. 


The Banshees of Inisherin es una dramedia íntima que explora de manera interesante temas como la trascendencia, la soledad y la rutina, y aunque seguramente resultará satisfactoria para los amantes de las historias pequeñas, su perspectiva tan cerrada evita que grandes sectores de la audiencia pueda encontrar lugares comunes con los personajes principales.