Ya lo dijo Woody Allen: “no le temo a la muerte, sólo que no me gustaría estar allí cuando suceda”.

Cállate y Rema. Instrucciones para Morir, lleva esta premisa hasta sus máximas consecuencias. La obra relata la historia de dos ánimas, entes, o seres inmortales (cualquier descripción se queda corta), que buscan la forma mantenerse con vida y evitar la extinción total de la raza humana. Para lograr este objetivo, los misteriosos seres se adentran en los vestigios de un cementerio y contemplan las almas de sus antepasados a fin de entender qué es la muerte.

El argumento de la obra no es fácil de comprender y se ayuda de dos potentes actuaciones y una ambientación exquisita para darle sentido a la narrativa. A pesar de tener una esencia experimental, la obra se basa en el teatro clásico para crear su estilo, las interpretaciones de Ángeles Marín y Luis Cárdenas le aportan un sentido “shakespeareano” al tono.

Los histriones se transforman en varios personajes durante la obra con un sentido camaleónico admirable: poetas musulmanes, judios paranoicos, madres dementes o curas frustrados, todo cabe en una obra que no se limita en la creación de personajes memorables. A pesar de contar con una narrativa compleja, el ritmo ágil, el tono cómico y el encanto de los diálogos; hacen que la densidad de la obra se aligere.

En un contexto teatral donde la economía de recursos, la simpleza y el minimalismo imperan; se agradecen producciones cuidadas y generosas como la de Cállate y Rema. La escenografía es una combinación muy interesante entre un paisaje urbano y místico, por momentos pensamos que nos encontramos en una fábrica inglesa y por otros nos adentramos a un paisaje en la niebla que remite al panteón más tenebroso.

Mención aparte merece la increíble ambientación sónica (en vivo) de Juan Pablo Villa. El músico dota a la obra de una atmósfera densa a partir de efectos de sonido, beats, drops y voces fantasmagóricas. La música es un personaje más en la obra, Cállate y Rema no sería lo mismo sin la participación de Villa.

La dirección de Ricardo Ramírez Carnero orquesta los elementos de forma inmejorable, se nota el cariño por los actores, por el texto, por los actores y por la historia.

Sin duda, Cállate y Rema. Instrucciones para Morir es  teatro para conocedores, una obra que profundiza en la muerta desde la comedia y el drama, desde el realismo y la ciencia ficción, desde la inmersión y la extravaganza.

La obra se presentará en el Teatro Salvador Novo de la Escuela Nacional de Arte Teatral del 13 de febrero al 10 de marzo de 2019.

  • Teatro Salvador Novo
  • Drama
  • Dramaturgia: Julian Robles
  • Dirección: Ricardo Ramírez-Carnero
  • Elenco: Angeles Marin y Luis Cárdenas White. Música en escena: Juan Pablo Villa