En medio del año 2123 hay dos personas, las únicas que existen en toda la Tierra. Ellos han sobrevivido a diferentes guerras, pandemias, un mundo postapocalíptico en el que las esperanzas por sobrevivir cada día se apagan más. Cada uno vive desde su lado del mundo que creen único y dónde piensan estar en la soledad, desconociendo lo cerca que se encuentran de encontrar ¿la felicidad? 

La luz del otro es lo que da la esperanza, el ver que ahí en algún lugar existe una luz que otra persona está produciendo y de la que nada se sabe. En medio de una exploración y la búsqueda por mantenerse con vida a pesar de la desesperanza los protagonistas comienzan un viaje en el que se van a encontrar, pero en el transcurso de la obra iremos descubriendo que pasará cuando estén juntos. 

Diana Sedano y Bernardo Gamboa son los protagonistas de esta historia que te lleva por un viaje tan pesado y desolador que el cambio a lo absurdo se vuelve un respiro en un espacio en el que se necesita. La actuación de Sedano es asombrosa y nos demuestra la versatilidad que tiene en el escenario, la podemos disfrutar con las escenas más densas y después llevarnos a una risa, junto con Gamboa quién además de su actuación nos regala un momento musical que se lleva los aplausos. 

El escenario lo componen distintas pantallas en las que podemos ver las imágenes de las catástrofes mundiales acompañadas de un texto que nos recuerda la fragilidad de la humanidad. Este proyecto les da la oportunidad de mostrar sus diferentes habilidades y la forma en la que se puede desarrollar el teatro, se trata de una obra en la que la que experimentar es parte de su esencia y aunque esto puede resultar complicado de aceptar, lo cierto es que cómo espectador nos da una oportunidad de abrirnos a conocer nuevas interpretaciones. 

Uno de los recursos que más puedo valorar de esta puesta es la forma en la que han tenido de recordarme que el teatro sigue siendo una forma de entretenimiento. Más allá de que nos sirva para dar un mensaje social y en el que se puedan abordar diferentes temáticas que se cuestionan ahí y que pueden generar una conversación afuera, también se trata de un entretenimiento, de una forma de pasar el tiempo viendo un espectáculo que nos saque una risa. 

La obra es un conjunto que funciona en escena porque está realizada a través de un viaje de la resiliencia de los personajes por la vida que han llevado y que cómo cualquier proceso de sanación te lleva por los lugares que van a hacerte sufrir y por otros dónde el placer es la compañía que te hace sonreír y tener la fuerza para un día más. 

La luz del otro se encuentra en temporada hasta el 7 de mayo de 2023 con funciones los jueves, viernes a las 20:00 horas, sábado a las 19:00 horas y domingo a las 18:00 horas en la Sala Xavier Villaurrutia del Centro Cultural del Bosque, con los boletos en $150.00 y también son aplicables las promociones regulares que tiene para los espectadores el Teatro INBAL.